El presidente Javier Milei justificó, por cadena nacional, el «equilibrio fiscal» y anunció dos medidas para profundizar el ajuste fiscal. El Gobierno confirma la motosierra a los sectores más vulnerables para cumplir con el FMI mientras premió a las patronales agrarias con la baja de retenciones, a los especuladores como el banco JP Morgan, que ganó con la bicicleta financiera.
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El anuncio oficial ocurre luego de sufrir otra derrota en Diputados con la aprobación de la ley de financiamiento universitario y la emergencia en la salud pediátrica.
Milei repite que no hay plata, pero en lo que va de su gobierno, le robó 2,100.000 pesos a cada jubilado. Un robo a los que trabajaron toda su vida.
La riqueza del país se la llevan un pequeño puñado de especuladores amigos de Caputo y los grandes grupos empresarios.— Nicolas del Caño (@NicolasdelCano) August 9, 2025
El presidente anunció dos decisiones que tomará para mantener “el equilibrio fiscal”. Primero, firmará una instrucción al Ministerio de Economía para prohibir que el Tesoro financie el gasto primario con emisión monetaria. Segundo, enviará al Congreso un proyecto de ley para penalizar la aprobación de presupuestos nacionales con déficit fiscal. La norma exigirá equilibrio o superávit y todo cambio se respaldará por recortes equivalentes. Según Milei el proyecto incluirá sanciones para los legisladores y funcionarios que no cumplan con las nuevas normas. Este proyecto es similar a la Ley de Déficit Cero de Domingo Cavallo del 2001. En el marco de aquella ley se ajustó en un 13% el salario a empleados públicos, jubilaciones y pensiones. Es conocido como finalizó la historia: Argentina terminó en una crisis con una pobreza mayor al 50% y una desocupación que rondó el 25%. En el año 2002, la ley fue declarada inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia.
Lo que anuncia Milei es ilegal. No puede disponer por decreto en materia tributaria según el art. 99 inc. 3 Constitución Nacional.
El déficit o superávit fiscal están ligados a la recaudación, por ende a los impuestos.
Su anuncio es totalmente monárquico: se arroga la…— Myriam Bregman (@myriambregman) August 9, 2025
Milei comenzó su discurso recordando que su gestión asumió con “un mandato económico claro: terminar con la inflación y generar las condiciones para que la Argentina crezca de forma sostenida todo el tiempo”. Luego repitió sus números económicos de ficción.
El presidente afirmó “hoy el Congreso de la Nación está impulsando gastos sin explicar su fuente de financiamiento, y sin preocuparse porque esa fuente implique o no imprimir dinero”, escoltado por Luis Caputo, ministro de Economía, y Santiago Bausili, presidente del Banco Central.
Milei consideró que “aprobar todos estos proyectos del Congreso implica ni más ni menos que volver el tiempo atrás”. El mandatario insistió “quiero ser muy claro con algo: no hay ninguna posibilidad de que yo permita que esto suceda. No vamos a volver atrás. no vamos a volver al pasado. No vamos a volver al sendero de la decadencia». Y culminó su discurso “y al Congreso le digo: si ustedes quieren volver atrás me van a tener que sacar con los pies para adelante”.
Hay plata para los grandes empresarios
El presidente dice que no hay plata, pero omite los regalos que concedió a los grandes empresarios e implican una pérdida de recursos y recaudación. Para Milei acá no importa el “equilibrio fiscal”.
La bicicleta financiera que benefició a bancos como el JP Morgan, ex empleador de Luis Caputo, costó un incremento de los intereses capitalizados del 2,6% del PIB en 2024 a 4,8% del PIB en 2025, según datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso.
La reducción de derechos de exportación a la soja y derivados y principales rubros de granos y carnes significan una transferencia de entre U$S 1.200 y 1.400 millones desde el Estado a los bolsillos de las patronales agrarias, o el equivalente al 0,19–0,22 % del PIB anual, según estimó CEPA. Lo mismo que serviría para financiar la mitad de la suba y el bono a los jubilados que vetó Milei.
También el Gobierno nacional eliminó las retenciones a más de 230 productos mineros, incluido el oro y el cobre, con la excusa de fomentar las exportaciones. Detrás del discurso de más ventas al exterior se esconde la destrucción de territorios, uso irracional del agua, expulsión de comunidades, contaminación y pérdida de biodiversidad.
El Gobierno disminuyó impuestos en favor de los dueños del país. Así redujo bienes personales (el único impuesto que se aplica sobre la riqueza), concedió moratorias de todo tipo a las patronales con la reforma fiscal y la Ley Bases, garantiza rebajas de contribuciones patronales y abre permanentes «blanqueos de capitales» para los ricos y evasores.
A enfrentarlo en las calles
Hay que enfrentar los planes ajustadores de Milei y el FMI en las calles. Los dirigentes sindicales mantienen la tregua con el Gobierno. Cuando se convocó a un paro nacional quedó demostrado que la clase trabajadora tiene la fuerza para proponerse derrotar los planes de Milei y los grandes empresarios. Es necesario que convoquen a un paro, plan de lucha y coordinar con los sectores que están peleando como trabajadores de Georgalos, Secco, Garrahan, Petroquímica Río Tercero, Inti, Vialidad, las gestiones obreras en Neuquén, las y los jubilados, las personas con discapacidad, docentes de Jujuy hasta terminar con estos planes económicos criminales.
Es necesario que sigan las medidas de lucha y que no sean aisladas en la perspectiva de la huelga general, hasta derrotar los ataques e imponer una salida de la clase trabajadora.
Un camino distinto que ponga en el centro las necesidades urgentes de las jubiladas, los jubilados, de los asalariados, de los que no tienen trabajo, que termine con el régimen de los tarifazos y las privatizadas, requiere cortar los lazos de dependencia con el imperialismo, requiere romper con el Fondo y sus recetas empobrecedoras, y es necesario movilizarse por el desconocimiento soberano de la deuda, y que todos los recursos estén orientados a una reorganización de la economía, bajo nuevas bases, mediante la planificación democrática, desde abajo.
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