Su nombre pulula por el imaginario colectivo, principalmente en los últimos meses por su rol en el mayor escándalo mediático: la guerra de Wanda Nara y Mauro Icardi. En ese conflicto que trascendió el plano de las indirectas y saltó hasta los tribunales, la China Suárez ocupa un espacio preponderante.
La ex de Benjamín Vicuña participa de toda esa batalla, aunque con una actividad un poco más sutil, dado que se fascina con la idea de subir una montaña de fotos junto al delantero del Galatasaray de Turquía, en lo que muchos consideran una decisión de provocación.
María Eugenia no duda en exhibirse como nunca antes en su vida, dado que en otras épocas procuraba mantener en la privacidad sus romances o historias de pareja. Algo absolutamente opuesto a su postura actual, que se vincula con una pulsión desesperada por mostrar cada nimiedad de la convivencia con Icardi.
En ese contexto de cargar sus redes sociales con toneladas de contenidos, la China acaba de confirmar que se sometió a un tratamiento estético para optimizar algunas características de su rostro. Así, la actriz, que aguarda el estreno de la serie Camaleón que protagonizó con Pablo Echarri, corroboró el proceso que llevó a cabo.
LA CHINA SUÁREZ SE RETOCÓ LA CARA Y MOSTRÓ EL RESULTADO
Sin tapujos, ni miramientos, Suárez comunicó al mundo, a través de su cuenta oficial de Instagram, que se acercó a un centro profesional para que le apliquen un procedimiento que persigue el objetivo de mejorar notoriamente la calidad de la dermis de su cara.
“Empieza la época de láser y luz pulsada”, redactó la ex pareja de Nicolás Cabré en una storie, que se configuró con una foto suya tumbada en una camilla. Luego, la blonda añadió otras postales para ostentar el resultado de ese trabajo estético.